Voces de jóvenes por el cambio: cuatro jóvenes líderes de acción por el clima que admiramos

Fecha:

Youth climate champions.

El cambio climático representa uno de los problemas decisivos de esta generación. Las tormentas catastróficas, las sequías extremas, el incremento de las temperaturas mundiales y el aumento del nivel del mar indican que nuestro planeta está cambiando en un sentido que no es el mejor. Cada uno puede poner de su parte para dejar de dañar el medio ambiente, y algunas de las personas que más entusiasmo demuestran en la acción por el clima son mujeres jóvenes y niñas.

En el marco de las celebraciones del Día Internacional de la Mujer el próximo 8 de marzo, cuyo lema es “Igualdad de género hoy para un mañana sostenible”, presentamos algunas de las jóvenes activistas que se encuentran al frente de los movimientos y del activismo por el clima, quienes explicarán lo que el movimiento significa para ellas.

Voces de jóvenes por el cambio: cuatro jóvenes líderes de acción por el clima que admiramos

Alejandra Quiguantar. Photo courtesy of Alejandra Quiguantar.
Alejandra Quiguantar. Photo courtesy of Alejandra Quiguantar.

Alejandra Quiguantar, Colombia

Alejandra Quiguantar, quien pertenece al pueblo indígena Pasto de la comunidad de Muellamués de Colombia, ha sido testigo de los efectos de la degradación ambiental a causa de la explotación de los recursos naturales.

“El cambio climático ha empujado a los pueblos indígenas a una situación de vulnerabilidad, en especial a las niñas, quienes padecen las peores consecuencias de la crisis ambiental y corren el riesgo de sufrir violencia cuando buscan alimento, agua o acceso a la educación”, afirma.

Como líder del movimiento Tejiendo Pensamiento e integrante de la Coalición para la Acción sobre acción feminista para la justicia climática del Foro Generación Igualdad, Alejandra se encarga de acercar las habilidades, la educación y la capacitación a las mujeres indígenas a fin de que tengan los instrumentos para ejercer presión en los espacios sobre el clima.

“Es esencial dotar de las herramientas necesarias a la juventud, las mujeres y las niñas para que puedan estar al frente de las iniciativas, los proyectos y programas ambientales con perspectiva de género, en los cuales las comunidades no sólo sean destinatarias, sino también partícipes de su diseño”, expresa. 

Tiene la esperanza de que la unidad y la solidaridad entre activistas del clima de todo el mundo permitirán encontrar soluciones y adoptar las medidas urgentes que nuestro planeta necesita.

“Como parte de la Coalición para la Acción sobre acción feminista para la justicia climática, que reúne a las voces más marginadas, estamos formando una plataforma increíble que tiene un propósito colectivo de transformar las realidades de nuestras comunidades. Estoy segura de que el trabajo en equipo nos permitirá crear medidas ambiciosas sobre el cambio climático y la igualdad de género”.

Dr. Henintsoa Onivola Minoarivelo. Photo: SCPS Stellenbosch.
 
Dr. Henintsoa Onivola Minoarivelo. Photo: SCPS Stellenbosch.

Henintsoa Onivola Minoarivelo, Madagascar

La Dra. Henintsoa Onivola Minoarivelo es ecologista teórica de Madagascar y, en este momento, está investigando sobre la ecología, el medio ambiente y la conservación. Henintsoa espera que sus investigaciones le permitan comprender la manera en que el cambio climático repercute en las interacciones entre plantas y animales por medio de la modelización matemática y las simulaciones informáticas.

“El cambio climático es uno de los problemas más acuciantes de nuestros tiempos”, sostiene. “No sólo es una amenaza para la biodiversidad, sino también para la humanidad. La acción por el clima es un tema que debe recibir atención urgente porque nadie quiere que sus hijas e hijos y las generaciones futuras vivan en un mundo caótico”.

Las investigaciones de Henintsoa le permiten comprender que el cambio climático afectará todos los aspectos de nuestras vidas, ya que no sólo incidirá en las cadenas de suministro mundiales, sino también en las actividades humanas cotidianas. En este sentido, los movimientos por el clima y las acciones por la igualdad de género encuentran el punto de mayor convergencia en la preocupación que generan los grupos más vulnerables de la sociedad, entre los que se encuentran las personas que viven en situación de pobreza, máxime las mujeres.

“Las mujeres son las más sensibles a los efectos cotidianos de los fenómenos climáticos extremos, en especial, en las zonas rurales de los países menos adelantados. Las mujeres soportan los efectos directos del cambio climático porque notan que las condiciones de vida de sus familias empeoran a raíz de estos fenómenos”.

Debido a su experiencia directa con los efectos del cambio climático, las mujeres y las niñas son fundamentales cuando se trata de determinar el futuro de este mundo.

Sólo quiero invitar a las mujeres jóvenes y a las niñas a que exploten sus capacidades en beneficio de la humanidad y, en la medida de lo posible, piensen de manera global antes que local”.

Petra Laiti. Photo: Heikki Isotalo.
Petra Laiti. Photo: Heikki Isotalo.

Petra Laiti, Finlandia

Para Petra Laiti, el activismo por el clima es su forma de mantener vivas las esperanzas de un mundo mejor y un futuro más prometedor.

“La respuesta que recibo de mi comunidad es muy importante para mí, no podría hacer lo que hago si no fuera por ella”, señala. “Si mi trabajo alimenta mis esperanzas, es señal de que estoy en el camino correcto”.

Petra, que tiene 26 años y es activista indígena de Finlandia, trabaja para crear conciencia sobre la experiencia de su comunidad, y el papel que los pueblos indígenas deben desempeñar en la acción por el clima.

“En este momento, los pueblos indígenas protegen el 80% de la biodiversidad que queda en la Tierra. Los derechos de los pueblos indígenas son derechos humanos”, añade. “Los derechos de los pueblos indígenas forman parte de la justicia climática. Los derechos de los pueblos indígenas deben ser el centro de atención. Si busca una señal que le indique dónde aprender, participar o alzar la voz de los pueblos indígenas, este es el camino”.

Para ella, lo más gratificante es difundir el conocimiento y ver la manera en que la nueva información repercute en las personas que la reciben y el modo en que modifican sus acciones a raíz de ello.

“Cuando alguien viene y me dice 'jamás me había dado cuenta' o 'no había pensado en eso', esos son los momentos de los que me enorgullezco”, explica. “Si la persona activista dedica su trabajo, sobre todo, a crear conciencia sobre un grupo marginado, nunca se puede esperar educar a toda la población. Sin embargo, cuando una sola persona empieza a comprender un nuevo punto de vista y se da cuenta de lo poco que sabe sobre los derechos de los pueblos indígenas, por ejemplo, es en ese momento cuando siento que he conseguido algo positivo”.

 
Niria Alicia Garcia. Photo: UNEP.
Niria Alicia Garcia. Photo: UNEP.

Niria Alicia García, México

Niria Alicia García es chicana, coordinadora de acciones por la justicia climática, educadora y promotora de los derechos humanos y trabaja en favor de la protección de la Tierra y la defensa de la dignidad de los pueblos históricamente oprimidos.

“Gran parte de lo que he conseguido se la debo a la lucha y alegría de mis ancestros, por lo que es mi deber servir y luchar con alegría para proteger Ia sagrada Madre Tierra y la humanidad a fin de que mis descendientes también puedan disfrutar de todo el esplendor que la Madre Tierra y esta vida tienen para ofrecer a la humanidad”, afirma.

Niria, quien en 2020 obtuvo el premio Jóvenes Campeones de la Tierra, cree que todas las personas deben ser conscientes de la conservación de nuestro planeta y trabajar en pos de su preservación y para poner fin a la degradación.

“Todas las personas aquí tienen el compromiso de proteger a las fuentes proveedoras de vida, ya sean nuestras mujeres, nuestras madres, nuestras aguas y manantiales, nuestros suelos fértiles y el aire fresco. Tenemos que proteger estas fuentes sagradas de vida por nuestro propio bien”, afirma.

Y es esa solidaridad en acción, el legado de quienes la han precedido y las generaciones venideras que la motivan cada día.

“Lo que me inspira a seguir es saber que no estoy sola. El hecho de saber que, cuando me presento, me levanto y hablo en favor de la protección, me acompañan la sagrada Madre Tierra y toda su creación. Creo que cuando se habla desde el corazón, se despierta ese amor intrínseco que toda la humanidad tiene por la Madre Tierra y es ahí cuando percibo que no soy yo la que habla, sino que es la verdad que fluye y resuena con la verdad que otras personas conocen, aunque muchas la hayan olvidado”.