Proyecto “Comunidades Protectoras“
Proyecto Binacional “Comunidades Protectoras” Fortalecimiento de Capacidades Institucionales para la Protección de Niñas, Niños, Adolescentes y Jóvenes de la Zona Transfronteriza Colombia-Ecuador, Afectadas por la Violencia y el Conflicto Armado
Hablamos de comunidades protectoras cuando en un territorio las familias, comunidades e instituciones se unen para trabajar en la protección de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes, evitar que sean víctimas de cualquier forma de violencia, abuso y explotación y promover su desarrollo integral. En una “Comunidad Protectora” los niños, niñas y adolescentes adquieren habilidades para construir proyectos de vida seguros y sin violencia y son reconocidos como sujetos de derechos que participan activamente en las decisiones que les afectan e interesan.
En diciembre de 2018, el Fondo de las Naciones Unidas para la Consolidación de la Paz (PBF por sus siglas en inglés) aprobó el proyecto “Fortalecimiento de Capacidades Institucionales para la Protección de Niños/as, Adolescentes y Jóvenes de la Zona Transfronteriza Colombia – Ecuador, afectadas por la Violencia y el Conflicto Armado”. “Comunidades Protectoras” es un Proyecto Binacional liderado por ONU Mujeres, UNICEF y ACNUR con el objetivo fortalecer los mecanismos de prevención y protección de la infancia y las mujeres frente a las problemáticas derivadas de la violencia en la frontera entre Colombia y Ecuador.
En esta iniciativa participaron más de 11 000 niñas, niños y adolescentes de los municipios de Chical, Maldonado, Eloy Alfaro y San Lorenzo en Ecuador y de los municipios de Cumbal e Ipiales en Colombia.
La implementación de las actividades del proyecto destinadas a consolidar entornos protectores concluyó en el último trimestre del año 2020. Durante los 24 meses, el proyecto ha logrado fortalecer el trabajo en red entre los liderazgos comunitarios, las instituciones aliadas y las agencias participantes en poblaciones con una diversidad étnica y cultural significativa.
En el marco del proyecto, se diseñó e implementó de manera exitosa un modelo de intervención comunitaria con enfoque de género, étnico y de ciclo de vida, que permitió actitudes y conductas preventivas y protectoras ante el riesgo de violencia de la población y formativos en masculinidades no violentas y corresponsables.
Durante el proyecto, ONU Mujeres apoyó en el desarrollo de análisis de género del derecho a la identidad de la zona transfronteriza de Ecuador-Colombia. Logrando, de forma participativa, que instituciones públicas, los actores humanitarios y las mujeres usuarias de los servicios relacionados identifiquen las barreras que entorpecen el acceso de las mujeres, niñas y adolescentes al registro civil y por tanto al derecho a la identidad. De igual forma, apoyó en el fortalecimiento, la protección y la resiliencia de las mujeres campesinas e indígenas de Ipiales y Cumbal, y su capacidad de respuesta comunitaria para la prevención y atención de la violencia basada en género a través de la Escuela de Mujeres Indígenas, donde 321 mujeres indígenas, campesinas y afrodescendientes trabajaron, desde su cosmovisión y perspectivas, trayendo consigo sus prioridades, problemáticas, saberes y prácticas del entorno que les rodea.
Para ONU Mujeres Ecuador el Proyecto representó una de las primeras experiencias de ejecución programática en territorio, la cual permitió fortalecer su presencia institucional a nivel local. El proyecto contribuyó a la prevención de la violencia contra las mujeres y las niñas y a la transformación de la concepción colectiva frente a los roles tradicionales y estereotipos de género en las comunidades e instituciones, posicionando y reivindicando los derechos de las niñas y mujeres. De igual manera, se incluyó la participación equitativa, evidenciando el liderazgo y toma de decisiones por igual de niñas, adolescentes y mujeres en cada iniciativa, así como el enfoque para promover procesos de igualdad de género y empoderamiento.