Mujeres de la nacionalidad indígena Awá

Mujer de nacionalidad Awá

Foto: WP

 

Convenio ONU Mujeres-PMA 2018-2021 para la incorporación de género en el Proyecto Binacional “Construcción de la Capacidad de Adaptación al Cambio Climático a través de acciones de Seguridad Alimentaria y Nutrición en comunidades vulnerables indígenas Awá y Afrodescendientes localizadas en la zona fronteriza entre Colombia y Ecuador”:

  • Derechos específicos-vida libre de violencia: De acuerdo al Estudio CAP en el caso de la población Awá el tipo de violencia que se refleja más es la violencia sexual al interior de la pareja y la violencia económica y patrimonial, no solo está naturalizada, sino que es invisible para hombres y mujeres. 

  • Derechos sobre la tierra: En la población Awá el 86,6% de los hogares tienen acceso a la tierra y el 79,7% disponen de cultivos, lo que confirma que este es un recurso productivo vital para las economías familiares y particularmente para la seguridad alimentaria. En estas comunidades se reflejan condicionantes simbólicos que excluyen a las mujeres del patrimonio familiar y un débil conocimiento de los derechos reconocidos en la ley ecuatoriana sobre la sociedad. De los resultados con los que se cuenta en la LB del proyecto, en la mayoría de los hogares la tierra, es de propiedad de los hombres (54,80%), mientras que las mujeres solo el 11,3% y en un 7,7% declaran que es de la pareja, 26,2% otros. 

  • Derechos al agua y a la alimentación: Las condiciones de seguridad alimentaria son altamente deficitarias: sólo uno de cada cinco hogares (20,3%) tiene un consumo aceptable de alimentos según la LB; los demás tienen un consumo pobre o cerca del umbral. Más de la mitad de los hogares (57,2%) tienen una dieta poco diversa. Frente a ello un alto porcentaje de hogares (66,6%) reduce la calidad de los alimentos, el tamaño de las porciones (42,1%), e incluso la cantidad de comidas al día (37,3%).

  • Derecho a la educación: En la población Awá aproximadamente en cuatro de cada diez hogares los niños/as no estudian (38,99% de niñas y un 44,04% de niños) y en el caso de los adolescentes este mismo indicador sube a 6 o 7 de cada diez (64,92% para las adolescentes y a 68,28% para los adolescentes). Los varones estudian menos para trabajar con sus padres en la agricultura y en el caso de niñas y adolescentes que no estudian, entre las razones están el trabajo del hogar y el hecho de que la escuela está alejada de su hogar.

  • Derecho a la Salud: En las comunidades indígenas AWA localizadas en la frontera norte del Ecuador, sólo en un 3,66% de los hogares las adolescentes acceden a servicios de salud sexual y reproductiva y en el caso de los adolescentes varones sólo un 2,7%, y, solo en un 56,31% de los hogares AWÁ se ha recurrido a atención médica en el parto. En los hogares Awá la ingesta extra de nutrientes para las embarazadas se da sólo en aproximadamente una tercera parte de los hogares que deberían tener acceso a los mismos (32% ácido fólico, 31,6% vitamina A y 36,4% hierro). Por su parte, el consumo de hierro y ácido fólico de mujeres lactantes es bastante reducido: 24,6% y 15,4% del total de hogares con mujeres lactantes respectivamente. En ambas situaciones se presenta una alerta sobre el estado de la salud nutricional de mujeres embarazadas y lactantes, debida en un porcentaje importante a la falta de recursos. En la población Awá el mayor porcentaje (41.44%) de los hogares reside en viviendas que no tienen servicio sanitario, y el 33.84% en viviendas con conexión a pozo séptico. Solo uno de cada diez hogares tiene servicio de recolección de basura, por lo que en los demás hogares la eliminación de basura es una actividad adicional que la realizan a través de la quema o entierro de esta, o tirándola al río, acequia o canal, incurriendo por otro lado en prácticas contaminantes.

  • Participación política: La ausencia de una perspectiva de género en la organización (social y comunitaria) y en las acciones que organizan y planifican, contribuyen a sostener y reproducir las desigualdades y discriminación hacia las mujeres. Por otro lado, la participación de las mujeres Awá está supeditada a las posibilidades efectivas de participación que tienen por la sobrecarga de las tareas del cuidado, a las relaciones de poder que invisibilizan la violencia simbólica y la creencia generalizada de la falta de capacidades de las mujeres para decidir en el ámbito público.
  • Derecho al trabajo: Aunque culturalmente se transmite una división sexual del trabajo muy marcada, en la práctica las mujeres participan no solamente en el trabajo del hogar y de cuidados, sino también en la agricultura y otras labores productivas. Mientras que sólo en uno de cada diez hogares los hombres participan también en las labores del hogar. Se evidencia una desvalorización del trabajo reproductivo y de las tareas de los cuidados. Las familias Awá son en su mayoría familias ampliadas, compuestas por familiares tanto de edad adulta mayor como niños y niñas pequeños, por lo que las mujeres tienen una sobrecarga de responsabilidades en las tareas del cuidado. Por su localización y dispersión, estas comunidades no cuentan, o cuentan en mínimo grado, con el acceso a servicios públicos de cuidado, que permiten modelos de cuidado con menor demanda del tiempo diario de las mujeres.